BERNARDO DE GÁLVEZ CONQUISTA PENSACOLA, EN AMÉRICA, EN LA GUERRA CONTRA INGLATERRA.

  

 Mariscal Bernardo de Gálvez. Escultura. Autor: Salvador Amaya. 2015. Museo del Ejército.
Mariscal Bernardo de Gálvez. Escultura. Autor: Salvador Amaya. 2015. Museo del Ejército.

8 de mayo de 1781

 

TOMA DE PENSACOLA

 

El día 8 de mayo de 1781, y tras un largo sitio, el general español Bernardo de Gálvez logró apoderarse de la plaza de Pensacola, en La Florida, que estaba en poder de los ingleses.

Hizo prisionera a la guarnición inglesa, compuesta de unos 14.000 hombres, y se apoderó de 153 piezas de artillería y numeroso material de guerra.

Esta victoria supuso el retorno de aquella península norteamericana a la dominación española.

El General Gálvez tuvo un comportamiento extraordinario a lo largo de toda la operación, en la que fue herido en el vientre y en la mano izquierda.

Fue ascendido  a Teniente General, nombrado Capitán General de la Florida y La Luisiana.

Carlos III  le concedió  el  título  de  Conde de Gálvez  y le permitió incluir en sus armas el lema: “Yo solo”, en reconocimiento a la toma de Pensacola.

 

PARA SABER MÁS:

 

LA BATALLA DE PENSACOLA

La dura guerra entre Gran Bretaña y sus trece colonias rebeldes de América del Norte se saldó con la victoria de los independentistas y con el nacimiento de USA, pero esto no habría sido posible sin la intervención de Francia y también de España, cuya contribución aún no ha sido debidamente estudiada.

Habitualmente el protagonismo se lo lleva Francia. Los relatos de muchas películas se basan en la historiografía anglosajona y se evita poner de manifiesto el papel que tuvo la Corona española en la Guerra de la Revolución Americana ( 1775 – 1783)

El propio George Washington reconoció, poco antes de que España decidiera su intervención, la importancia que tendría la participación de la Corona española en la guerra de independencia americana: "Con España en guerra, Inglaterra seguro que se vería obligada a renunciar a sus proyectos americanos".

Por supuesto que la colaboración de España y Francia con los rebeldes americanos no fue desinteresada. Ambas potencias deseaban desgastar la capacidad de militar de Gran Bretaña y lo iban a conseguir en sus colonias americanas, además de vengarse por la derrota de la Guerra de los Siete Años.

Era el 8 de mayo de 1781, cuando un gran soldado español de Málaga, Bernardo de Gálvez y Madrid, contribuyó con su heroísmo y decisión a la independencia de los Estados Unidos. Bernardo logró una importantísima y decisiva victoria del ejército español sobre los casacas rojas de la Gran Bretaña. El hecho tuvo lugar en la Florida, en el Golfo de México, en la ciudad que dio nombre a tan importante batalla: PENSACOLA.

“Yo solo”, símbolo reconocido por el rey español Carlos III, aparece como lema en el escudo de armas de Bernardo y era uno de los símbolos de los adelantados españoles en Estados Unidos. Cuando las baterías de costa inglesas cañoneaban la flota española y en contra de la opinión de José Calvo de Irázabal, que estaba al mando de la escuadra hispana, Bernardo de Gálvez y Madrid decidió entrar con su nave en la bahía de Pensacola, logrando con sus tropas rendir la guarnición inglesa.

La conquista de Pensacola supuso una revancha a la humillación de la guerra de los Siete Años, que había supuesto la pérdida para España de Menorca y la Florida.

Bernardo de Gálvez sería nombrado años más tarde Gobernador y Capitán General de West Florida. Se casó con una criolla de Nueva Orleáns, ciudad a la que amaba como propia. Además de español, Bernardo Gálvez se sintió como un auténtico americano más.

 

ANTES DE LA BATALLA:

Estos españoles establecieron las bases de la exploración y colonización del continente Norteamericano, que perduró durante cuatro siglos. La organización de la presencia española se basó en las misiones y en las ciudades.

Alrededor de las misiones, dirigidas por los jesuitas y franciscanos, se desarrollaron huertas y ranchos, donde se cosecharon las hortalizas y la cría de ganado que traían los españoles desde México y que entonces eran desconocidos en estas tierras americanas.

Posteriormente a las misiones de los jesuitas y franciscanos, los españoles impulsaron la fundación y desarrollo de un gran número de ciudades desde la Florida hasta California: San Agustín, reconstrucción de Nueva Orleans, Galveston (en honor de Bernardo de Gálvez), Santa Fe, San Antonio, Alburquerque, Los Ángeles, San Francisco y otras muchas ciudades más pequeñas y menos conocidas por nosotros.

Pensacola era una posición estratégica para los ingleses. Después de la victoria de Bernardo en Mobile (Alabama), los ingleses tuvieron que refugiarse en Pensacola, cuya defensa estaba bajo la responsabilidad del general inglés John Campbell.

Una de las mayores dificultades estratégicas para la toma de Pensacola, estaba en su entorno geográfico. Bernardo opinaba que debería tomarse por mar y que por consiguiente se precisaba de una importante flota para asegurar el éxito del proyecto. Pero había un problema: Miguel de Goicoechea aseguraba ante el Consejo de La Habana que el ataque debería realizarse por tierra. Esta falta de unidad en el criterio hizo que el ataque se retrasase mucho tiempo.

Bernardo de Gálvez se desplazó a La Habana para convencer al gobernador de Cuba, Diego Navarro, y al Comandante General Navia, de su estrategia. Logrado su objetivo, se le autorizó la entrega de 3.900 soldados y provisiones para seis meses. México le cedió unos 2.000 soldados más y Puerto Rico y Santo Domingo contribuyeron también.

El 16 de octubre de 1780, 2 meses después de la toma de Mobile, una impresionante flota, bajo el mando de Bernardo de Gálvez, puso rumbo al continente norteamericano con objeto de atacar y tomar Pensacola a los ingleses. La flota zarpó de la Habana, el entusiasmo de la multitud y el tañir de las campanas y las oraciones de los fieles, empujaron con determinación a Bernardo y su flota hacia la conquista de Pensacola.

A los pocos días ocurrió un hecho importante, que en circunstancias habituales, habría obligado al comandante de la flota a suspender definitivamente su proyecto: el día 18 de octubre, se desencadenó una terrible tormenta huracanada, ocasionando el hundimiento de una nave y la total dispersión de la flota en el Golfo de México. Algunas naves terminaron en Mobile, otras en Nueva Orleans e incluso algunas acabaron en Campeche, Península del Yucatán. Pero Bernardo no se intimidó por las circunstancias adversas. Pensacola caería tarde o temprano en manos españolas, ése era el objetivo y estaba decidido a conseguirlo. Bernardo volvió a la Habana para someterse a un Consejo de Guerra.

El general inglés John Campbell, que estaba al mando de la guarnición de Pensacola, tuvo conocimiento del desastre de la flota española y ordenó al coronel van Hayleden salir de Pensacola con 700 soldados , 400 casacas rojas y 300 indios aliados de los ingleses, para recuperar Mobile.

El 7 de enero de 1781 los ingleses sitiaban Mobile y atacaban a la guarnición española por la noche. Pero los españoles, con menores recursos, al mando del joven Ramón Castro, rechazaron completamente el asalto de los británicos e incluso el propio coronel inglés cayó muerto. Los ingleses se retiraron sin poder recuperar Mobile.

Bernardo de Gálvez no se desanimó y se enfrentó al Consejo de Guerra y de nuevo le apoyaron en dicha empresa. Pasaron tres meses hasta que la flota estuvo lista, ahora contaba con unos 1.315 soldados y 5 navíos de la armada

El 13 de febrero de 1781, Bernardo salió de la Habana y puso rumbo al Golfo de México. Bernardo iría repasando los errores y causas de lo ocurrido en su anterior intento de recobrar Pensacola para la Corona española y el Virreinato Mexicano. Ahora repetiría el intento de desembarco con un navío de línea , el buque insignia "San Ramón" de 64 cañones, 3 fragatas, un paquebote y varios pequeños transportes más, con una fuerza de sólo 1.315 soldados.

El 23 de febrero de 1781, la flota divisa Santa Rosa, pequeña isla muy próxima a Pensacola. Durante la noche, Bernardo desembarca en Puerto Sigüenza, ataca a la guarnición inglesa y toma siete prisioneros. Durante la operación, dos fragatas inglesas fondeadas en la bahía son alertadas por los disparos y cañonean a los españoles. A las órdenes de Bernardo se produce el contraataque y las dos fragatas inglesas huyen en dirección a Pensacola.

El 9 de marzo de 1781, finalizada la escaramuza, Bernardo de Gálvez decide iniciar la fase final de la operación y ordena poner rumbo a tierra cruzando el estrecho entre la isla y tierra firme. El resultado es una sorpresa, ya que el “San Ramón”, buque insignia de la flota, encalla. Se hunde parcialmente y durante toda la noche trabajaron duro para poner el barco a flote. Bernardo ordenó a Calvo de Irázabal abandonar el San Carlos, para evitar otro posible hundimiento, y que continuara con el resto de la armada.

Calvo de Irázabal , junto a varios oficiales, se negó a obedecer, llegándose a una situación muy complicada. El problema surge porque José Calvo de Irázabal era el jefe de las fuerza navales, y aunque Gálvez fuera el Comandante en jefe de todas las fuerzas, en las decisiones de temas navales Irizabal tenía la última palabra, quien rehusó entrar en la bahía de Pensacola.

 

YO SOLO:

Ante este motín, Bernardo de Gálvez decide entrar solo en la bahía de Pensacola. En este momento se manifiestó su valentía y su capacidad de asumir riesgos. Bernardo estaba dispuesto a demostrar que sabía navegar con su barco y que asumía en solitario tan arriesgada misión. A bordo del  Galveztown inició la entrada en la bahía de Pensacola, acompañado del navío de Valenzuela.  Estas dos naves venían de La Luisiana y estaban directamente bajo el mando de Bernardo. El resto de la flota quedó fuera de la misión sin poner rumbo al interior de la bahía.

Cuando los ingleses castigaban duramente con su artillería las dos naves, el resto de las naves de la flota española decidieron seguir el rumbo iniciado por Bernardo. Calvo de Irázabal se quedó atrás con el San Ramón y acusó a Gálvez de traidor. La reacción de Gálvez fue decisiva para la misión, éste no hizo caso de tal acusación e izó la bandera de Almirante de la flota, recibiendo el aplauso y reconocimiento del resto de las embarcaciones. La fragata San Ramón, capitaneada por Irázabal se volvió y puso rumbo en solitario a Cuba.

Con la flota fondeada en la bahía, Bernardo esperó la llegada de refuerzos de Mobile y de Nueva Orleans. Durante la espera el general inglés, John Campbell, ordenó la quema de edificios civiles de Pensacola, lo que produjo indignación a Bernardo por la falta de humanidad y mala fe del general inglés.

El 19 de abril de 1781 llegó una escuadra de combate procedente de Cádiz, los refuerzos eran una realidad, Bernardo contaba ahora bajo su mando con 7.498 soldados y 19 navíos de línea. Era la hora de iniciar el asalto a Pensacola.

Enfrente estaban dispuestos a resistir 3.600 hombres pertenecientes al 16º y 60º Regimiento  inglés, el 3º Regimiento alemán de Waldeck, los Regimientos de Realistas de Pensilvania y Maryland, los West Florida Royal Forresters, la Royal Artillery, los Dragones de Maryland, y unos 950 indios,  civiles armados y marinos de los buques HMS "Mentor" y "Port Royal" .

El 1 de mayo de 1781 los españoles van desplegando baterías de veinticuatro libras, desde donde disparan a las posiciones de los ingleses.

El 6 de mayo los españoles efectúan 560 disparos con morteros y 200 de metralla causando graves daños a los ingleses , neutralizando numerosos cañones.

 

Bandera inglesa capturada por Gálvez:

El día 8 de mayo de 1781, una vez neutralizadas las defensas británicas externas, Bernardo ordenó disparar al interior de Fort George. La fortuna de un disparo de mortero de los españoles produjo la explosión del almacén de pólvora de los ingleses. El resultado fue dramático, de golpe habían muerto más de 100 soldados.

 

Aprovechando el desconcierto, el capitán Cajigal inició el cañoneo sobre la fortaleza donde ondeaba todavía orgullosa la bandera de la Gran Bretaña. Bernardo ordena el asalto a sangre y fuego a la fortaleza inglesa, desencadenándose un durísimo combate cuerpo a cuerpo.

 

Finalmente, las tropas inglesas se ven desbordadas por el ímpetu y decisión de las tropas españolas. John Campbell se ve obligado a levantar bandera blanca y rinde la plaza de Pensacola a la Corona Española.

El 9 de mayo el general Campell firma las capitulaciones. El acuerdo consideraba la entrega no sólo de Pensacola, sino también de los fuertes al norte del Golfo de México, excepto San Agustín y la isla de Jamaica. En el mismo documento se garantizaba la repatriación de las tropas inglesas a Inglaterra.

El 10 de mayo de 1781, a las 3 de la tarde, las tropas inglesas arrían su bandera y se iza  en su lugar la de la Corona Española. Las tropas españolas tomaron posesión de Fort George.

Bernardo nombró a Arturo O’Neill  gobernador de general de La Florida y logró acuerdos y alianzas con tribus locales, lo que supuso un periodo de paz en el norte del Golfo de México, mientras perduró la presencia de tropas españolas en estos territorios.

 

CONSECUENCIAS DE LA BATALLA DE PENSACOLA:

La victoria se celebró con júbilo y sonaron las campanas en Nueva Orleans, La Habana, México y Madrid. Pero seguramente la mayor satisfacción la tuvo George Washington, que estaba luchando con sus tropas rebeldes contra el Imperio Británico. CON LA SALIDA POR BARCO DE LAS TROPAS INGLESAS SE PUSO FIN DEFINITIVO A LA PRESENCIA DE TROPAS INGLESAS EN NORTEAMÉRICA.

El 10 de mayo de 1871, los casacas rojas huyeron y dejaron vía libre a George Washington para lograr la independencia de los Estados Unidos. Thomas Jefferson escribió al General Gálvez, expresando sus gracias por la ayuda de España a la causa revolucionaria.
Con esta victoria, España y México recobraron la Gran Florida y los territorios de Nueva Inglaterra quedan limpios de tropas inglesas y a punto de formarse los Estados Unidos de América. La Corona Española y Bernardo de Gálvez habían prestado una gran ayuda económica y política a la independencia Norteamericana.

Posteriormente, en febrero de 1782, Bernardo de Gálvez, con unos 10.000 soldados atacaró los últimos reductos ingleses en Jamaica y Nueva Providencia en las Bahamas

El 20 de enero de 1783 se firmó el TRATADO DE PARÍS entre Inglaterra por un lado y Francia y España por otro, reconociéndose la independencia de los Estados Unidos y el derecho de España a la Gran Florida.

En junio de 1784, Carlos III nombró a Bernardo Gobernador de la Capitanía General de Cuba, cuando éste tenía 38 años.

El consejero del rey Carlos III, Conde de Aranda, acertaría en sus predicciones: “Esta república federal nació pigmea, por decirlo así, y ha necesitado del apoyo y fuerza de dos Estados tan poderosos como España y Francia para conseguir su independencia. Llegará un día en que crezca y se torne gigante, y aún coloso temible en aquellas regiones. Entonces olvidará los beneficios que ha recibido de las dos potencias, y sólo pensará en su engrandecimiento... El primer paso de esta potencia será apoderarse de las Floridas a fin de dominar el golfo de México. Después de molestarnos así y nuestras relaciones con la Nueva España, aspirará a la conquista de este vasto imperio, que no podremos defender contra una potencia formidable establecida en el mismo continente y vecina suya”.

 

BIOGRAFÍA DE BERNARDO DE GÁLVEZ:

Bernardo de Gálvez nació en Macharaviaya, provincia  de Málaga, el 23 de julio de 1746. Su nombre completo era Bernardo Vicente Apolinar de Gálvez y Madrid.

Emprendió la carrera militar con 16 años. Pudo ingresar en el ejército porque su familia era hidalga, requisito imprescindible en aquella época. Pero no lo hizo en el ejército español, sino en el francés (su tío era abogado en la embajada francesa en España), y en aquel ejército era fácil ascender. Obtuvo inmediatamente el nombramiento de teniente del Regimiento Royal Cantabre.

Posteriormente ingresó, desde su fundación, en la Real Escuela Militar de Ávila de los Caballeros, especie de academia para oficiales de Estado Mayor, que comenzó a funcionar en abril de 1774.

 

En 1776 volvió a esta Real Escuela, pero brevemente. Su nuevo director había dejado vacante la coronelía del Regimiento de Infantería de la Provincia de Luisiana, y fue nombrado el 22 de mayo para ocupar ese puesto. El 19 de septiembre fue nombrado gobernador interino de la provincia.

Su principal misión era estar al tanto, a través de la red de agentes secretos, de los acontecimientos en las colonias británicas en Norteamérica inmersas en la guerra, y preparar el terreno para un posible conflicto con el Reino Unido.

 

El mismo año que tomó posesión del cargo, comenzó a reforzar las defensas del territorio, tanto en tierra como en mar y en el Misisipí. Aumentó el personal de su regimiento, que sólo contaba con un batallón. Creó otro, y para eso tuvo que traer reclutas de Nueva España y de las Islas Canarias. Aumentó también el número de milicianos, reclutados entre los habitantes del territorio.

 

 

Mantuvo la prohibición de esclavizar a los indios, desapareció este tipo de esclavos, y por este motivo avivó las simpatías de las tribus hacia las autoridades.

 

Tanto para Luisiana como para las regiones fronterizas de las Provincias Internas, Gálvez impulsaba una penetración cultural con las tribus mediante los regalos y el comercio, para acabar paulatinamente con la hostilidad de las comunidades internas hacia los españoles, y evitar así las costosas y estériles campañas militares contra los indios.

 

Durante la administración de Bernardo de Gálvez, lealistas ingleses que huían de la Guerra de la Independencia Americana fundaron en 1778 Galveztown, que es la actual Gálvez, en Luisiana (que no debemos confundir con la ciudad de Galveston, en Texas, que también lleva su nombre).

 

Llegados por fin los refuerzos que esperaba de Cuba, el 30 de marzo de 1780 comenzó a preparar el ataque a Pansacola. Hubo contratiempos, tanto meteorológicos (huracanes) como falta de hombres.

Cuando por fin recibió los refuerzos de Cuba, acabó tomando la población de Pensacola el día 8 de mayo de 1781.

España apoyó desde el principio la guerra de Independencia de los Estados Unidos mediante Bernardo de Gálvez, que negoció directamente con altos cargos norteamericanos.

Gálvez bloqueó el puerto de Nueva Orleans para que los navíos británicos no pudieses utilizar el río Misisipí y también facilitó el tránsito de los rebeldes estadounidenses a través de todo el territorio al sur de la zona de guerra, ayudando al envío de armas y municiones destinadas a las tropas de George Washington.

Gálvez abortó el último plan británico de resistencia al tomar la isla de Nueva Providencia en las Bahamas, con lo que mantuvo el dominio español en el Caribe y aceleró el triunfo de las armas estadounidenses.

Gálvez fomentó el desarrollo de las ciencias en el virreinato (era interés científico y económico, al mejorar tanto las agricultura como las aplicaciones militares).

 

LEGADO Y RECONOCIMIENTO:
A pesar de la envergadura, mérito y repercusión histórica de sus acciones, Bernardo de Gálvez es prácticamente un desconocido para la opinión pública española y estadounidense.

En el año 2008 se creó la Asociación Cultural Bernardo de Gálvez en Málaga, estrechando los lazos entre su localidad natal, Macharaviaya, la provincia de Málaga y las ciudades estadounidenses de Galveston y Pensacola. Dos documentos localizados por dicha asociación con fecha 8 de mayo de 1783, aniversario de la batalla de Pensacola, acreditaban el agradecimiento del Congreso de los Estados Unidos a la ayuda que el Reino de España prestó al pueblo americano e incluían el deseo de honrar a Bernardo de Gálvez con un retrato en el Capitolio en reconocimiento a su destacada participación en su guerra de Independencia. Dicho documento fue ratificado en el Congreso de los Estados Unidos y entregado el retrato, obra de Carlos Monserrate Carreño, copia exacta del cuadro de Bernardo de Gálvez realizado en 1684 y atribuido a   Mariano Salvador Maella,   que fue colgado en las paredes del Capitolio el 10  de  diciembre d e  2014,   por  orden  directa  del que era en aquel momento presidente de los Estados Unidos, BARACK  OBAMA.

El 16 de diciembre de 2014, el presidente de los Estados Unidos de América, BARACK OBAMA, firmó la resolución conjunta del Congreso estadounidense, por la que se concedía la ciudadanía honoraria de los Estados Unidos a Bernardo de Gálvez y Madrid, 229 años después del fin de la guerra de independencia estadounidense.

 

Imágenes

  • TOMA DE PENSACOLA

    Bernardo de Gálvez. Escultura.Autor SALVADOR AMAYA.2015. Museo del Ejército.
    Bernardo de Gálvez. Escultura.Autor SALVADOR AMAYA.2015. Museo del Ejército.
  • TOMA DE PENSACOLA

    Bandera de la ciudad de Pensacola, formada por 5 banderas (de los países que ayudaron). Se la conoce como "La ciudad de las cinco banderas". España está representada por la bandera de Castilla y León.
    Bandera de la ciudad de Pensacola, formada por 5 banderas (de los países que ayudaron). Se la conoce como "La ciudad de las cinco banderas". España está representada por la bandera de Castilla y León.
  • TOMA DE PENSACOLA. 3.

    Bandera tomada por Bernardo de Gávez a los ingleses, en Pensacola.
    Bandera tomada por Bernardo de Gávez a los ingleses, en Pensacola.
  • BATALLA DE PENSACOLA

    Cuadro al óleo "POR ESPAÑA Y POR EL REY. GÁLVEZ EN AMÉRICA". Autor AUGUSTO FERRER DALMAU. Museo del Ejército
    Cuadro al óleo "POR ESPAÑA Y POR EL REY. GÁLVEZ EN AMÉRICA". Autor AUGUSTO FERRER DALMAU. Museo del Ejército