Cuando Pintura y Fotografía se encontraron…

  

 
Cámara fotográfica

En 1839 se empezaba a anunciar una transformación en los medios de expresión artística. El semanario satírico “La Caricature Provisoire” publicó: “Hay un rumor sordo de que, gracias a este instrumento, desaparecerán de golpe y como arte de magia los paisajistas, lo retratistas, los pintores decoradores y todos los demás artistas”. Ese “instrumento” era la Fotografía, un invento presentado en París por Daguerre, que introduce una nueva manera de retratar el mundo. Se trataba de una acción mecánica y absolutamente verosímil que abrirá las puertas a infinitas maneras de captar la realidad. Hoy queremos detenernos en el instante en que este extraordinario invento se presenta en sociedad. Cuando pintura y fotografía se encontraron. Cuando se ofreció una nueva posibilidad de representarse. El impacto social era inevitable, las posibilidades que ofrecía la nueva industria, hechizarán a la sociedad del siglo XIX y han seguido admirando a cada generación gracias a su infinita capacidad de experimentación.

Desde el Museo del Ejército queremos celebrar el Día Internacional de la Fotografía invitando a la sociedad a la visita de nuestra actual exposición temporal: “Frente al Objetivo. Retratos de estudio en la colección del Museo del Ejército”. Esta exhibición nos ha permitido compartir una pequeña parte de la amplia colección de fotografía que conservamos. La visita ofrece infinitas ventanas a la realidad de la época, ventanas abiertas a la identidad individual que nos aproximan a la historia mediante la imagen captada en un instante. Invitamos además al espectador a reflexionar sobre la identidad personal, pero también sobre el poder de la cámara como herramienta imprescindible para narrar la historia, siendo fuente directa para documentar, registrar y conservar el pasado. El Museo conserva en sus colecciones algunos ejemplos de la herramienta, del ojo mecánico que posibilitó el registro. Cámaras de firmas precursoras, como Kodak, Zeiss, Gaumont y Voigtlander. Hoy mostramos una de ellas, la Zeiss-Ikon modelo Ikonta, de formato medio y portable. Un modelo ligero ideal para aficionados a la imagen que permitió a la sociedad de un siglo registrar el presente. Hoy esa capacidad es prácticamente universal, tal y como recordara Ouka Leele, desde la cámara que hoy mostramos hasta la integrada en nuestros dispositivos móviles: “Nadie escapa a al fascinación que produce la fotografía, es como una caja mágica”.