el 12 DE DICIEMBRE DE 1526 NACE EN GRANADA ÁLVARO DE BAZÁN.

  

 Álvaro de Bazán. Museo del Ejército.
Álvaro de Bazán. Museo del Ejército.

En la ciudad de Granada nace el 12 de diciembre de 1526 uno de los más gloriosos marinos españoles, el célebre Almirante Don Álvaro de Bazán, primer Marqués de Santa Cruz de Marcenado.

En la efemérides de su nacimiento recordamos su decisiva intervención en la batalla naval de Lepanto, donde mandaba la escuadra de reserva, compuesta por 35 buques, y con la que intervino brillantemente en momentos cruciales de uno de los combates más terribles jamás librado en el mundo, y en el que, junto a otros insignes capitanes de los famosos tercios de infantería y de las coronelías italianas y alemanas, Don Álvaro de Bazán puso de manifiesto su excepcional valor y sabiduría marinera.

Hombres como el Marqués de Santa Cruz del Marcenado constituyen el cuadro de honor de las figuras ilustres de nuestros ejércitos. Sus hazañas en la mar, combatiendo a los ingleses, franceses, turcos, portugueses y moros, son las credenciales que avalan su sin par figura.

 

 

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La batalla de Lepanto.

" En 1570 todo parecía confluir para que se produjera un choque entre las potencias cristianas y el Imperio otomano.

Por un lado, el poder del sultán turco era cada vez mayor en el norte de África, lo que representaba una amenaza para el Imperio español, por cuanto hacía posible un desembarco otomano en la península ibérica en ayuda de los moriscos hispanos.

Por otra parte, la invasión de Chipre por las tropas de Selim II llevó a Venecia a decantarse por la acción.

El 25 de mayo de 157112​ se firmaron en Roma las capitulaciones de la Santa Liga que unió al Imperio español, el Papado, la Serenísima República de Venecia, el Gran Ducado de Toscana, la República de Génova y el Ducado de Saboya. La Santa Liga tenía como fin la destrucción de las fuerzas de los turcos, que eran declarados enemigos comunes y quedaban dentro del ámbito de la acción Túnez, Argel y Trípoli.

Se nombraron tres comandantes. Por el Papado Marco Antonio Colonna, por Venecia a Sebastián Veniero y por el Imperio español a don Juan de Austria, quien ostentó el mando militar supremo de la Santa Liga.

La flota reunida por la Santa Liga estaba compuesta por doscientas siete galeras, seis galeazas y setenta y seis buques ligeros.

Álvaro de Bazán y Guzmán se unió con las treinta galeras de la Escuadra de Nápoles el 5 de septiembre de 1571.14​

Desde el principio dio muestras de prudencia en sus consejos y se convirtió en uno de los más eficaces colaboradores de Don Juan de Austria a quien aconsejó que buscase sin demora un enfrentamiento contra el enemigo porque comenzaban a surgir roces entre los aliados.

En el orden de combate Don Juan de Austria le dio a Álvaro de Bazán la misión de hacerse cargo de la retaguardia para socorrer aquellas zonas donde existiese más peligro para la armada cristiana. Para esta tarea se le asignaron treinta galeras, más una agrupación de embarcaciones menores.15​

El 7 de octubre de 157116​ tuvo lugar la batalla de Lepanto. Su escuadra quedó a media milla, por la popa, de la línea de frente.

Álvaro de Bazán fue responsable de que la flota cristiana partiese muy de mañana y formara quince millas afuera del golfo de Patras. Al comenzar el combate, Agostino Barbarigo, quien se encontraba al mando del ala izquierda cristiana, se separó de la formación, dejando un canal libre por el que la flota otomana podía amenazar la formación cristiana por el flanco.

El ala otomana mandada por Mohamed Sirocco intentó envolver a Barbarigo, pero Álvaro de Bazán envió a diez galeras, bajo el mando de Martín de Padilla que decidió la situación en el flanco izquierdo, ya que los barcos otomanos quedan encerrados en una pinza y empujados contra la costa.

En el centro de la batalla, la galera La Real, nave capitana de Don Juan de Austria, se abalanzó contra la nave capitana turca de Alí Bajá, La Sultana y ambas naves se enzarzaron en un combate cerrado. Marco Antonio Colonna apoyó a la nave de Don Juan de Austria, situándose a la retaguardia de La Sultana y aislándola de socorro y refuerzo.

Álvaro de Bazán envió a diez galeras y un grupo de fragatas y bergantines para apoyar el éxito que puede suponer la captura de la nave capitana otomana. Como resultado de este refuerzo, el centro otomano quedó totalmente deshecho.

En el flanco derecho cristiano las cosas siguieron un rumbo distinto. Juan Andrea Doria quedó retrasado con respecto al resto de la formación cristiana y Uluj Alí sobrepasó la retaguardia del genovés y se dirigió al centro del combate. Doria fue tras él intentando darle alcance pero no puede detener su avance. Uluj Alí atacó a varias galeras de la Orden de Malta pero Álvaro de Bazán en persona, con las diez galeras que quedaban en retaguardia, pudo salvar la situación y obligar a Uluj Alí a emprender la retirada.

Álvaro de Bazán fue el hombre clave en la victoria de Lepanto, sus órdenes salvaron la situación de la flota cristiana en tres momentos críticos y actuó en cada momento de la forma correcta maximizando los pocos recursos que tenía.

Tras la Batalla de Lepanto, Álvaro de Bazán participó en la ofensiva que Don Juan de Austria dirigió con éxito sobre Túnez.

En diciembre de 1576 fue nombrado Capitán General de las Galeras de España. "

(Wikipedia)