Academia de Artillería

La 262 promoción de oficiales de artillería

Componentes de la 262 despidiéndose del Estandarte

Homenaje a los caidos

 En el Patio de Orden de la Academia de Artillería se celebró el pasado viernes 17 de mayo el acto para conmemorar el 50 aniversario del egreso de la 262 promoción de oficiales de artillería (XXIX promoción de la AGM), tras una vida de servicio a España, compromiso que se ha convertido en eterno al ser renovado por última vez frente al Estandarte.

La conmemoración del egreso de una promoción es uno de los actos más emotivos que se celebran en el centro, porque brinda la posibilidad a la Academia de Artillería de acoger a una promoción de artilleros que regresan a la cuna del arma, en una jornada cargada de emoción por el reencuentro con los compañeros de promoción, el recuerdo de vivencias y anécdotas pasadas y como no, el recuerdo de los que ya no están.

El acto estuvo presidido por el coronel director de la Academia, Rafael de Felipe Barahona, acompañado por los jefes de las distintas jefaturas del centro y antiguos profesores de la 262 promoción.

El que fuera número uno de la promoción y jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra hasta abril de 2017, el general de ejército, Jaime Domínguez Buj leyó la orden de la Academia del 12 de julio de 1974 y posteriormente dedicó unas palabras a todos los asistentes, manifestando que «para un artillero la búsqueda de la excelencia no es una opción, es una exigencia. Podrá o no alcanzarla, pero debe buscarla siempre y en cualquier puesto que desempeñe».

A los alumnos formados en el patio del antiguo convento, el general de ejército les dedicó unas palabras: «Caballeros y damas alféreces cadetes y caballeros y damas alumnos que nos acompañáis en este acto: hoy es la última vez que la 262 promoción formará en este patio y seréis vosotros los que nos reemplacéis formando en él. Vosotros sois nuestro relevo. En este acto recogéis el testigo que hoy os entregamos y lo hacemos con la tranquilidad de saber que queda en buenas manos, pues también vosotros sois hijos de esta Academia, de nuestra Academia de Artillería y, por eso, sabemos que cuando finalicéis vuestros estudios estaréis en condiciones idóneas para enfrentar cualquier tipo de reto».

El acto continuó con el Estandarte ocupando su puesto en el Patio de Orden, siendo recogido de manos del general de ejército; posteriormente, los componentes de la promoción fueron pasando por delante del Estandarte para saludarlo, haciéndolo a continuación los familiares que lo desearon.

Tras ello, el coronel director recalcó en su discurso que «en los aniversarios la Academia recibe de las promociones mucho más de lo que da. Alumnos y profesores, empezando por el director, recibimos el ejemplo de quienes nos precedieron y de sus familias, y esto tiene más valor que muchas horas de clase».

En el homenaje a los que dieron su vida por España, el general de brigada Tomas Rivera Moreno, premio «Francisco Ramírez de Madrid» en 2011 y la viuda del capitán Luis Gurrea Serrano, fallecido en acto de servicio en el Sáhara en 1975 y el coronel director y la viuda del capitán Brájimo, componente de la promoción fallecido, depositaron sendas coronas en dos lápidas que se encuentran en las paredes del patio de orden del antiguo convento de San Francisco.

El acto finalizó con la entonación del himno de los artilleros por todos los presentes en el Patio de Orden y el desfile de la unidad de alumnos.