Academia de Artillería

Prácticas técnicas de cacheo

Marcha de endurecimiento

Ejercicio de tiro con pistola

 A principios del mes de octubre, los sargentos alumnos de la Academia de Artillería se instruyeron en el Campo de Maniobras y Tiro de «Matabueyes» de Segovia, realizando diversos ejercicios, cuyo objetivo fue consolidar sus habilidades como combatiente general, perfeccionando aquellas individuales ya adquiridas en cursos anteriores, como las propias al mando de un pelotón.

Entre otros ejercicios, realizaron marchas de endurecimiento, con la mochila “Altus” a la espalda, con un calor que no correspondía al mes de octubre segoviano. La finalidad de estas marchas es incrementar la resiliencia de los alumnos, fomentando su liderazgo, aumentando la cohesión del grupo y la forma física del personal.

Los alumnos también realizaron prácticas de «check-point», creando diferentes escenarios que podrían encontrarse en este tipo de controles, analizando los procedimientos a desarrollar y finalmente los alumnos participaron en un «feedback» para conocer las necesidades, dificultades y demás variables que pueden darse en estos puestos de control.

Asimismo, los sargentos alumnos, equipados con aparatos de visión nocturna, realizaron ejercicios tácticos-operativos en ambiente nocturno, simulando amenazas que podían darse en situaciones convencionales o en enfrentamientos asimétricos, para comprobar los niveles de preparación para una respuesta rápida, la cohesión del grupo y la capacidad de integración de las acciones a realizar.

También prepararon ejercicios de tiro con el fusil HK G36 y con la pistola HK-USP, poniendo a prueba sus habilidades como tiradores y como jefes de línea de tiro. Realizaron ejercicios de precisión de tiro, de tiro de combate… adoptando diversas posturas de tiro para mantener un adecuado adiestramiento en las destrezas de tiro, como base fundamental de la instrucción individual del combatiente.

Además, realizaron prácticas con diferentes equipos de transmisiones, con el radioteléfono ligero táctico PNR-500 o con el radioteléfono PR4G, radioteléfono que, aunque la primera versión ha cumplido ya 25 años en el ejército, representó un salto tecnológico para las comunicaciones militares en España, dando el salto del mundo analógico al digital.