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Regimiento de Infantería 'América' 66, de Cazadores de Montaña

Armas del AMÉRICA 66

Berriak

lunes 16 de marzo de 2015

Zenbakia: 030

Instrucción Técnica en Montaña Invernal y ejercicio ACOMI 2015.

Combatiendo en invierno.

Frio, viento y altitud escenario de la preparación para el combate.

La unidad avanzando en travesía con raquetas.

La unidad avanzando en travesía con raquetas. (Foto: RCZM 66)

Refugio de fosa de nieve protegida.

Fosa de nieve protegida. (Foto: RCZM 66)

Puesto de tiro en una posición defensiva.

Puesto de tiro en una posición defensiva. (Foto: RCZM 66)

El valle de Otal ha sido el escenario del ejercicio más importante realizado por el Batallón “Montejurra” en época invernal.

Durante la primera semana de marzo, siguiendo la programación prevista en el plan de adiestramiento del batallón, las unidades han llevado a cabo un ejercicio de vida, movimiento y combate en época invernal. En una primera fase se realizaron diversas travesías de montaña, como la que trascurre desde el refugio de Lizara hasta la estación de Canfranc. También se realizaron ascensiones como el collado del Bozo o el collado de la Magdalena.

Bajo una fuerte ventisca hubo que realizar fortificaciones en nieve. Las noches también proporcionaron el escenario para llevar a cabo nuestra instrucción. Hubo que practicar la construcción de refugios de nieve, para luego poder dormir en su interior.

La segunda fase del ejercicio fue propiamente de combate. Una de las unidades fue trasportada al puerto de Cotefablo para preparar un tema de ataque sobre el pueblo de Otal. Se llevó a cabo sin novedad, aunque el fortísimo viento que azotó el collado provocó un retraso en el avance de la fuerza.

Los dos últimos días, el batallón realizó un ejercicio de doble acción. Una de las unidades desempeñó el papel de enemigo. Se dividió en tres grupos que ocuparon los pueblos de Otal y Escartín, mientras que otro grupo terrorista ocupó las cotas que bordean el valle. Al amanecer fue realizado el ataque sobre estos pueblos. El ejercicio concluyó con una emboscada realizada sobre las unidades que se replegaban después del combate.

 Una semana de instrucción donde ha quedado patente, una vez más, el alto grado de preparación que se requiere en un cazador de montaña. La dureza que impone la orografía y el clima no pueden ser un obstáculo para llevar a cabo la misión encomendada. Los cazadores del regimiento América dan testimonio permanente de ello.