Brigada "Guadarrama" XII

El día 09 de marzo la Brigada "Guadarrama" XII celebra los cien años desde que el Ejército español encuadró unidades acorazadas, que desplegaron por primera vez en el Rif durante la guerra de Marruecos.

El acto  militar es el actividad central conmemorativa del I Centenario de las unidades acorazadas, la efemérides principal del año 2022, siendo presidido por el general de ejército jefe de estado mayor del Ejército de Tierra (JEME), y la formación mandada por el coronel jefe del regimiento acorazado "Alcázar de Toledo" 61.

La formación está compuesta por el mando de la línea, escuadra de gastadores, unidad de música de DIACU, banda de guerra de la BRI XII y agrupación a pie.

A las 12:30 se inicia el acto recibiendo honores y revistando a la Fuerza el JEME, realizándose a continuación la lectura de la reseña Histórica del Centenario de las Unidades Acorazadas y a continuación una alocución del general jefe de la Brigada XII.

Se prosigue con el acto de homenaje a los que dieron su vida por España, finalizando con el desfile a pie y el desfile motorizado.Todas las actividades se realizaron respetando las medidas COVID vigentes.

En el centenario de su creación, el Ejército de Tierra encuadra sus medios acorazados en los regimientos acorazados de las Brigadas I, X, XI y XII,  en  los regimientos de caballería de las Comandancias Generales de Ceuta y Melilla asi como en los regimientos de caballería de las Brigadas VI, VII,  el regimiento de caballería España 11 y el grupo de caballería de la Brigada II. Sus guiones están hoy presentes en la formación.

En la brigada se dispone del Museo de Medios Acorazados, uno de los museos de carros más importantes del mundo.En él se conserva, presenta y expone la historia de las unidades acorazadas españolas, rindiendo merecido homenaje a los hombres que las dotaron y sirvieron a lo largo de sus cien años de continuada actividad y servicio a España.

La Brigada "Guadarrama" siempre ha sido considerada heredera y depositaria de la tradición de todas nuestras unidades acorazadas.Mantiene sus capacidades para las acciones ofensivas, potentes, profundas y resolutivas, lo que se sintetiza en su "espíritu corazado".De hecho, procede de la anterior Brigada Acorazada "Guadarrama" XII creada en 1966, dentro de la que también en su día fue la División Acorazada "Brunete" nº 1, adoptando como lema "aprisa, duro, lejos", que contiene la esencia más pura de las unidades carristas y refleja las características de su maniobra. Este lema imprime carácter a todas sus intervenciones.

Han sido numerosos los hechos de armas que han jalonado la historia de los medios acorazados, desde la lejana guerra de Marruecos con su Renault FT-17 hasta los tiempos presentes y sus materiales más innovaciones y avanzados   como el Leopardo 2E, demostrando que la brigada está en contínua evolución de los mismos.

El día de hoy es un importante homenaje que recoge y refleja el buen hacer de los carristas españoles, de sus unidades y de sus medios.

Antecedentes

El primer carro de combate adquirido por España es el RENAULT FT-17 que llega a Madrid el 23 de junio de 1919. El vehículo es sometido a una serie de pruebas en la Escuela Central de Tiro de Carabanchel (Madrid), presenciadas algunas de ellas por el rey Alfonso XIII.

Tras el "Desastre de Annual", en julio de 1921 surge la necesidad de dotar al Ejército con material moderno y resolutivo. El día 12 de enero de 1922, el Ejército de Tierra recibió la primera de las 10 unidades del FT-17. El día 9 de marzo del mismo año, se organizó en la Escuela Central de Tiro la 1ª compañía de carros ligeros del Ejército Español, al mando del capitán Vicente Valero de Bernabé y Casañes.  Es, por tanto, el 9 de marzo el día que tradicionalmente se ha considerado como el origen de las unidades acorazadas en España.

Primera laureada a un carrista: sargento de infantería Mariano García Esteban

El sargento García Esteban formaba parte de la compañía de carros de asalto, que el día 5 de junio de 1923 efectuaba una operación de escolta de un convoy con destino a "Tizzi Azza". Durante el desarrollo de dicha operación se desencadenó una intensa descarga de fusilería enemiga. El sargento se quedó ciego al ser alcanzado por una bala que penetró por la mirilla de la torreta de su carro. A pesar del intenso dolor mantuvo la posición y consiguió consumir hasta el último cartucho de su ametralladora, provocando numerosas bajas. Sólo en el momento en el que el enemigo abandonó su reducto consintió en retroceder para ser atendido.