España celebra su Día de la Fiesta Nacional

El Rey y la Princesa depositan la corona de laurel

Como cada 12 de octubre, sus Majestades los Reyes de España, han presidido el desfile del Día de la Fiesta Nacional, celebrado en Madrid. Desde la tribuna de autoridades instalada en la madrileña plaza de Neptuno, Felipe VI y Dª Letizia, acompañados por la Princesa de Asturias, han observado un desfile que, en esta ocasión y debido a la intensa lluvia, tuvo que verse reducido, prescindiendo, también, del desfile aéreo, la intervención de la Patrulla Águila y el tradicional salto de la patrulla acrobática de paracaidismo del Ejército del Aire, pero dejando unas imágenes para el recuerdo.

Con la presencia de numerosas autoridades civiles y militares, incluyendo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, miembros del Gobierno –como la ministra de Defensa, Margarita Robles– y distintos presidentes autonómicos, el acto comenzó con el solemne homenaje a la Bandera Nacional, así como a aquellos que dieron su vida por España –momento en el que el Rey y la Princesa de Asturias han depositado una corona de laurel en el monolito de recuerdo–.

Desfile de alumnos de la AGBS

Con posterioridad, y al cancelarse el desfile aéreo, se ha pasado directamente al desfile terrestre, comenzando con las unidades motorizadas.

Tras los vehículos del Ejército de Tierra, la Unidad Militar de Emergencias, Guardia Civil, Policía Nacional, Protección Civil, Samur y Bomberos. Cerraron el desfile las unidades a caballo que, finalmente, sí pudieron desfilar a pesar de la copiosa lluvia que hizo que, en algunos momentos, se pensase que el desfile iba a tener que ser suspendido.

Asimismo, cabe destacar que los soldados españoles desplegados en misiones internacionales también han estado muy presentes en el desfile del Día de la Fiesta Nacional, ya que su compromiso y trabajo por la paz tuvo un espacio y protagonismo destacado. Y es que, para mostrar ese reconocimiento a quienes trabajan por la paz en el mundo, en lugares y situaciones tan complicadas como la que se viven en Líbano, este año la bandera de Naciones Unidas desfiló escoltada por la de aquellos países que forman la misión que lidera España en Eslovaquia.

El público aguantó estoicamente la copiosa lluvia