Organizacion del Ejército de Tierra

La Orden DEF/708/2020, de 27 de julio, recoge el desarrollo de la organización básica del Ejército de Tierra, publicada en el Boletín Oficial de Defensa número 152 de 2020. La nueva estructura garantiza -a partir de los recursos disponibles- la generación rápida y sencilla de las capacidades que demande el Jefe de Estado Mayor de la Defensa.

 

En este sentido, la Fuerza se reduce a tres Mandos de primer nivel: el Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad, la Fuerza Terrestre y el Mando de Canarias (MCANA) del ET, lo que permite la transición de estructuras orgánicas. Además, se agrupan unidades con responsabilidades comunes en un solo conjunto orgánico, como el MCANA del ET, que integrará las Comandancias Generales de Ceuta, Melilla y Baleares.

 

 

Por parte de las dos divisiones, se especializan en función de sus cometidos principales. En primer lugar, la nueva División “San Marcial” se encargará de generar y adiestrar unidades con capacidades muy específicas y con alta disponibilidad (como son paracaidistas, montaña, operaciones especiales y aviación del ET). En segundo lugar, la nueva División “Castillejos” hará lo correspondiente en cuanto a las Brigadas de Combate, atribuidas a diferentes compromisos en el ámbito nacional e internacional.

 

Asimismo, el ET ha decidido reorganizar las capacidades sanitarias de la Brigada de Sanidad, transformándola en una Agrupación de Sanidad e integrándola en la Brigada Logística. Esta reorganización, que mantiene las capacidades que ya aportaba la Brigada de Sanidad, permitirá obtener una mayor eficiencia del personal sanitario puesto a disposición del Ejército de Tierra y aumentar la eficacia del apoyo sanitario en las operaciones.

 

En cuanto al Mando de Apoyo a la Maniobra, éste generará y adiestrará a los diferentes capacitadores de nivel Cuerpo de Ejército y División (como artillería, ingenieros, transmisiones, apoyo logístico y otros específicos).

 

Esta organización “Orientada a la Misión” mejora la respuesta del ET a la evolución del entorno, que es cada vez más rápida. Así, se facilita la acción conjunta de las Fuerzas Armadas y se presta particular atención a la prevención y respuesta ante futuras pandemias y crisis sanitarias. Del mismo modo, las unidades contempladas en esta Orden Ministerial ejercerán sus funciones y cometidos conforme se vayan produciendo las adaptaciones orgánicas necesarias.