El Ejército combina el esfuerzo de la operación `Balmis´ con la recuperación de las actividades de instrucción y adiestramiento

 

La Brigada XVI, en una desinfección

Continúa la vigilancia en Puerto del Rosario

La disminución en el esfuerzo volcado en la operación “Balmis” va en paralelo con el aumento progresivo en las actividades de instrucción y adiestramiento de las unidades del Ejército, en las que se aplican todas las medidas de prevención necesarias. Aún así, siguen estando implicadas en la operación entre 600 y 900 personas diarias.

La principal contribución del Ejército en la lucha contra la pandemia en estos momentos son las descontaminaciones y desinfecciones de instalaciones, como la que el domingo llevó a cabo en Mercabarna personal del Regimiento de Infantería “Barcelona” nº63; la del Batallón de Cuartel General de la Brigada “Extremadura” XI en una residencia de Casar de Cáceres (Cáceres); la de la Brigada “Canarias” XVI en un centro social de Gran Canarias; hasta un total de 16 la pasada semana. Las limpiezas también se realizan en las propias instalaciones militares, como hizo el Regimiento Ingenieros nº7 en Ceuta.

No obstante, se mantienen también apoyos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en cometidos de seguridad de infraestructuras críticas y en las fronteras con Marruecos, según la necesidad de la Policía y la Guardia Civil. Ese es el caso de la Policía Militar de la Brigada “Extremadura” XI, con la Policía Nacional en Badajoz o de componentes de la Brigada “Canarias” XVI, en la vigilancia del aeropuerto y puerto comercial de Puerto del Rosario, en Fuerteventura.

Comparecencia de la ministra

Para dar cuenta del desarrollo de todas ellas, la ministra de Defensa, Margarita Robles, compareció el 22 de mayo en la comisión del Senado. “Contribuir a salvar vidas ha sido el único objetivo de la operación y de las Fuerzas Armadas en esta crisis -explicó la ministra-. Sus hombres y mujeres ocuparán una página de oro cuando se escriba la historia de esta crisis sanitaria”. Por ello, reiteró su agradecimiento por el esfuerzo llevado a cabo, algo que, además, está haciendo en persona en cada una de las visitas que realiza a distintas unidades; como la Agrupación de Transporte nº1, que visitó el 21 de mayo.

Además, recordó las casi 20.000 actuaciones en 2.250 poblaciones, el 60% de las cuales han sido desinfecciones. En este tiempo, 9.621 componentes de las FAS han estado en cuarentena, 682 han dado positivo y 150 han requerido hospitalización. Así mismo, se evacuó desde Mali a dos positivos y siete casos sospechosos, que han tenido una evolución positiva.

Solidaridad

Más allá de las misiones que se les encomiendan dentro de la operación, las unidades del Ejército también han querido poner su grano de arena para paliar los efectos que ha tenido la crisis sanitaria a nivel social y económico, para lo que han colaborado en las campañas de recogidas de alimentos no perecederos puestas en marcha. Así, la Brigada “Aragón” I ha podido hacer entrega de varios kilos aportados por el personal de la Base Discontinua “San Jorge” al Banco de Alimentos de Zaragoza; el Batallón de Helicópteros de Transporte V, al de Colmenar Viejo; o el Batallón de Helicópteros de Maniobra III, al de La Rioja.

La Unidad de Servicios de Base “El Empecinado”, para la recogida de alimentos de la Cuarta Subinspección General del Ejército y Cáritas Castrense, organizó una carrera solidaria con la que lograron reunir más de 500 kilos de alimentos. Participaron más de 70 personas, repartidas por la base y las provincias de Valladolid, Segovia, Palencia, León Madrid, e, incluso, Irak (en distintos circuitos). El reto era realizar un recorrido de seis kilómetros por binomios y con la Bandera de Mochila.

Entre las unidades del Ejército y de la Guardia Civil ubicadas en el área de la Tercera Subinspección General del Ejército, se donaron otros 1.500 kilos a Cáritas Parroquial de Badalona.

La instrucción recupera el ritmo

Paralelamente al desarrollo de estas acciones relacionadas con la operación “Balmis”, las unidades van recuperando poco a poco el ritmo cotidiano con la realización de ejercicios y actividades de instrucción y adiestramiento. En esta fase de transición hacia la nueva normalidad, también se está intensificando el uso de las instalaciones de simulación, siempre aplicando las medidas de prevención.

En el caso de las unidades de la Brigada “Galicia” VII encuadradas en la Fuerza de Muy Alta Disponibilidad de la OTAN para 2021, el objetivo es alcanzar el nivel requerido para afrontar este compromiso.

También han pisado de nuevo los campos de maniobras estos días la X Bandera “Millán Astray”, para una jornada de instrucción en “Las Navetas”, en Ronda (Málaga); la Compañía de Defensa Contra Carro de la Bandera de Cuartel General de la Brigada “Rey Alfonso XIII” II de la Legión, para un tiro nocturno, en el de Viator; el Regimiento “Castilla” nº16, el de la base “General Menacho”; el Batallón de Cuartel General de la “Guzmán el Bueno” X con misil TOW en “Cerro Muriano”; el “Canarias” 50, en “La Isleta” para practicar tiro de precisión; el Grupo de Regulares nº54, para el combate en zonas urbanas; o el Regimiento de Artillería Antiaérea nº73, en el “Barranco de los Sánchez” de Cartagena.

En estos días también se ha producido la llegada a muchas unidades del personal de tropa de nueva incorporación, que está viviendo una fase de adaptación atípica y marcada por las medidas de prevención.